El culurgione es una pasta rellena. La lámina de pasta fresca se obtiene mezclando harina, semolina, huevos, agua, manteca de cerdo y sal.
El culurgione se cierra de una manera muy particular, para recoger el relleno hecho con patatas, queso de oveja rallado, ajo, aceite de oliva virgen extra y hojas de menta natural. La forma del “culurgione” es oblonga y mide entre 6 y 10 cm. Se sirve en general con salsa de tomate y queso de oveja rallado, aunque existen variantes di condimento con mojama o con aceite de oliva virgen extra y salvia.